El presente artículo plantea el pensamiento de Heidegger como una alternativa superadora de las conceptualizaciones modernas del aprendizaje que lo consideran como mera adquisición o construcción de la verdad por el conocimiento o integración en la verdad mediante el desarrollo de un nivel de conciencia superior. Con Heidegger se va a poder hablar del aprendizaje como habitar la verdad y ser habitado por ésta, lo que supone la adquisición, la construcción, la integración, pero además “estar-en-el-mundo” (Dasein) como un sí-mismo ante lo otro. Esto implica una idea viva del aprendizaje, pues no se trata de una “representación” que se adquiere o se construye, ni una simple “presentación” de un todo unitario en lo que uno se integra con el aprendizaje, sino que se comprende cómo realidad viva que está presente y se representa, proyectándose de forma creativa y compartida en el “ser-con” (Mitsein) con tendencia al desocultamiento pleno de la esencia del Ser con lo que habitar en la plenitud de su sentido.