Resumen:
El sistema agroalimentario, en la actualidad, está propuesto a partir de la dinámica capitalista, lo que implica que los principios de este modo productivo (imperio de la competencia, maximización de la ganancia y acumulación basada en la explotación del trabajo asalariado) se apliquen a la producción, la distribución y el consumo de alimentos. El derecho a la alimentación adecuada está en las manos del mercado; de allí que el sistema sea responsable de mil millones de subnutridos y, a la vez, de mil millones de personas con sobrepeso. El modelo se orienta cada vez más a la generación de riqueza por encima de imperativos sociales y ambientales. La descampesinización, la contribución del sistema agroalimentario al cambio climático y la creciente concentración de la tierra es una muestra de ello.