Resumen:
En un contexto económico marcado, desde hace ya más de dos décadas, por el auge del modelo de libre mercado, que enfatiza el crecimiento como mecanismo fundamental para generar oportunidades de empleo e ingreso, el tema social dominante en la agenda social de América Latina ha sido la reducción de la pobreza. Por ello, las reformas para liberalizar la economía han sido acompañadas, sobre todo desde los años noventa, por un amplio repertorio de reformas sociales que comparten tres ideas centrales: focalizar y descentralizar la acción pública, así como privatizar algunos segmentos de los servicios sociales, particularmente en el ámbito de la salud y la educación.