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Título :	Editorial. For a radical and inclusive Pedagogy Editorial. Para una Pedagogía radical e inclusiva
Palabras clave :	Pedagogy;education;training;awareness;com-plexity;Pedagogía;educación;formación;conciencia;complejidad
Editorial :	Red Iberoamericana de Pedagogía
Descripción :	he following is an introduction to a pedagogical approach that the author has been generating and publishing progressively, in hundreds of books and articles since 1992-93 to the present. In 2005 it was called ‘evolutionary complex’, and in 2014 it was renamed as ‘radical and inclusive’. This approach starts from a metaphor. Invite to observe education as if it were a tree or an iceberg. It concludes that what we can consider ‘our education’ only perceives and identifies with the trunk, the branches, the flowers, the fruits ... or the emerged part of the iceberg. And that the submerged, the radical, the buried part is completely abandoned, without realizing its vital importance for the whole being. The only possi-ble attention is the total, including the one that emerges, the sink, the ecosystem, the climate, diseases, water, etc. Everything seems to indi-cate that our education is focused on the exter-nal: the social, the practical, the profitable, the technologies, the results, etc. This perception is correct, but it is partially and dangerously in-complete: the exterior without the interior is like a compass that does not rest firmly on paper. Peda-gogy is not informing us that the resulting line in people and societies is peripheral, that this un-derstanding, proper to the West, comes from an education based on knowledge, and that what is known is born of myopia. Myopia is a disease of sight that is acquired. When you have it, it looks good, but only up close. The horizon is not part of the figure or the background. And the horizondoes count in education. There are two kinds of horizons: the exterior and the interior. The first is associated with development, progress. Of the second, nothing can be written. However, it is the key to a focused education. Only a centered education can favor the exterior-interior balance. From this dialectic better understood and better resolved could aspire to evolve in complexity-consciousness, not only to progress. The path is concrete and does not start on the surfaces or in the peripheries: it begins in each being and takes place from each self-consciousness. It is the path of formation, based on interiorization and consciousness. A redefined Pedagogy, more open to its roots and, in this sense, deeper and more lucid, can be of great help in processes of observation and presentation of alternatives. For all this, Socrates, Philosophy, Psychology and, in general, the West is of little use to us. El siguiente escrito es una introducción a un enfoque pedagógico que el autor ha ido generando y publicando progresivamente, en cientos de libros y artículos desde el año 1992-93 hasta la actualidad. En 2005 se denominó ‘complejo-evolucionista’, y en 2014 se renombró como ‘radical e inclusivo’. Este enfoque arranca de una metáfora. Invita a observar la educación como si fuese un árbol o un iceberg. Concluye con que lo que podemos considerar ‘nuestra educación’ sólo percibe y se identifica con el tronco, las ramas, las flores, los frutos… o la parte emergida del iceberg. Y que se está abandonando por completo la porción sumergida, la radical, la enterrada, sin percatarse de su vital importancia para todo el ser. La única atención posible es la total, incluyendo en ella la que aflora, la hundida, el ecosistema, el clima, las enfermedades, el agua, etc. Todo parece indicar que nuestra educación está volcada en lo externo: lo social, lo práctico, lo rentable, las tecnologías, los resultados, etc. Esta percepción es correcta, pero es parcial y peligrosamente incompleta: lo exterior sin lo interior es como un compás que no se apoyase con firmeza en el papel. La Pedagogía no nos está informando de que el trazo resultante en personas y sociedades es periférico, que este entendimiento, propio de Occidente, proviene de una educación basada en el saber, y que lo que se conoce nace de la miopía. La miopía es una enfermedad de la vista que se adquiere. Cuando se tiene, se ve bien, pero sólo de cerca. El horizonte no forma parte de la figura, ni del fondo. Y el horizonte sí cuenta en la educación. Hay dos clases de horizontes: el exterior y el interior. El primero se asocia al desarrollo, al progreso. Del segundo, nada se puede escribir. Sin embargo, es la clave de una educación centrada.  Sólo una educación centrada puede favorecer el equilibrio exterior-interior. Desde esta dialéctica, mejor comprendida y mejor resuelta, se podría aspirar a evolucionar en complejidad-conciencia, no sólo a progresar. El camino es concreto y no empieza en las superficies ni en las periferias: comienza en cada ser y tiene lugar desde cada autoconciencia. Es el camino de la formación, con base en la interiorización y en la conciencia. Una Pedagogía redefinida, más abierta a sus raíces y, en este sentido, más profunda y lúcida puede ser de gran ayuda en procesos de observación y de presentación de alternativas. Para todo ello, Sócrates, la Filosofía, la Psicología y, en general, Occidente nos es poco útil.
URI :	http://biblioteca-repositorio.clacso.edu.ar/handle/CLACSO/156825
Otros identificadores :	https://revista.redipe.org/index.php/1/article/view/276
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