Descripción:
El propósito de este trabajo es mostrar, para el caso de la Universidad Autónoma Metropolitana, algunos de los problemas de su estructura organizacional que dificultan la gestión de la docencia y que, eventualmente, podrían afectar la calidad de la educación que imparte. Se sostiene que tal problemática no es producto nada más de una ineficiencia operativa de las instancias de gestión o de la incapacidad de las personas encargadas de ellas, ni tampoco de los profesores y alumnos, sino que el problema hunde sus raíces en causas estructurales que derivan a su vez de las disposiciones normativas que rigen la Institución. Más aún, se apunta que después de 2001, cuando se aprobaron las nuevas Políticas Generales y Operacionales de Docencia, la propia estructura -no modificada por ellas- ha dificultado la instrumentación de la innovadora filosofía educativa que contienen.