Descripción:
El mundo occidental, paradójicamente, luce anquilosado ante el avance científico y tecnológico: ¿Augusto mausoleo, aunque tumba sin más? ¿fin de camino?. La resistencia a abandonar el mundo conquistado se ha convertido en fuga de todo lo que significa muerte; la vida, sin embar-go, parece detenida. Para el hombre de América Latina, en cambio, las circunstancias han gene-rado otra visión de mundo: una recurrente búsqueda de identidad, donde los proyectos de vida se desarrollan entre contrastes y prolijidad, con un norte despejado, y un patrimonio histórico, que en cuanto preñado de sentido mágico, tragedias e ilusiones, procura posibilidades en lugar de crear sensación de haber coronado el cenit. Mundos encontrados; donde uno, acreedor, se siente llamado a esculpir el cuerpo del mundo; otro, deudor, arremete, maquina o se despereza en el destierro. Ante la incertidumbre, las interrogantes toman la palabra: ¿qué significa pensar América Latina? ¿se vive de la historia o se hace historia? ¿se tiene identidad o se construye la identidad? ¿se tiene libertad o se asume la libertad? Estas preguntas nos ubican en el funda-mento del filosofar como pertinencia del camino del pensar.