Resumen:
Admirar un imponente monumento construido a lo largo de tres siglos y que ofrece logros artísticos es la actitud común de quienes desde la Plaza Mayor de la ciudad de México dirigen la vista hacia el costado norte . Preguntarse cuáles fueron las etapas principales de la construcción; cómo se obtuvieron los recursos para realizarla; de qué lugares salieron los operarios; quiénes fueron y de qué manera trabajaron en ella; de dónde provinieron los materiales y por qué vías fueron transportados; cómo soportaron ese colosal esfuerzo la economía y la sociedad de la Nueva España en los siglos XVI, XVII, XVIII y comienzos del XIX, ya representa un enfoque histórico que no muchos hacen suyo y que requiere de una amplia documentación, pacientemente investigada, para obtener algunas respuestas, así sean parciales.