Resumen:
El Ministerio es un punto de partida que pone a la lucha contra las violencias y desigualdades por motivos de género en un lugar central de la agenda de gobierno. La principal tarea es construir las herramientas necesarias para abordar estos problemas de manera seria y eficaz. Crear institucionalidad que genere bases sólidas y trascienda las gestiones.
No obstante, este primer año presentó enormes desafíos vinculados no solo al armado y puesta en marcha del organismo sino, fundamentalmente, al contexto de la pandemia que puso de manifiesto las condiciones de extrema vulnerabilidad y precariedad en las que viven miles de personas en el país. Esta situación nos obligó a trabajar en dos niveles en paralelo: la urgencia y el largo plazo.