Descripción:
Este trabajo pretende poner en evidencia los diferentes aspectos de la violencia colonial que afectó a los pueblos indígenas de la región bonaerense entre los siglos XVI y XVIII, analizando no sólo las expresiones manifiestas de violencia física (masacres, cautiverios, ejecuciones ejemplares y castigos corporales) sino también las formas menos flagrantes de coerción, miedo y sujeción que se desarrollaron a lo largo de un continuum de formas de violencia invisible: la violencia estructural, la violencia simbólica y la violencia normalizada. Este marco impersonal y permanente de relaciones sociales desiguales es el contexto que se debe tener en cuenta al estudiar las variadas estrategias que desplegaron las sociedades indígenas para sobrevivir.El artículo procura rescatar el modo en que fueron percibidos los múltiples rostros de la violencia colonial por las sociedades indígenas y consignar las reacciones que generaron. Se trata de demostrar que esas formas de violencia afectaron en ondas concéntricas no sólo a los grupos indígenas incorporados por la fuerza al sistema colonial sino a aquellos que solemos designar como “no sometidos” pero que, moviéndose en sus márgenes, tuvieron estrechos y conflictivos contactos con la sociedad colonial.