Descripción:
Una pregunta censal universalmente aceptada: ¿Sabe usted leer y escribir? y una escueta respuesta: Si/no, suelen ser los parámetros con los que se mide el analfabetismo de una nación. Sin embargo, no tenemos que ser cabalistas para pensar que nuestro desconocimiento o lejanía del alfabeto es una cuestión un tanto más complicada que lo que dejan entrever los parámetros establecidos por un censo o por los criterios de lecto/escritura que suelen dictar los ministerios de educación.