Resumen:
La insurrección zapatista se produjo en un momento histórico especial, cuando las fuerzas contrahegemónicas estaban debilitadas y desarticuladas. Operó en esas circunstancias como un despertador mundial de movimientos antisistémicos. La travesía zapatista de 2021 tiene lugar en un momento semejante. La pandemia produjo desconcierto en mucha gente y en los movimientos sociales y políticos. Proliferan planteamientos e iniciativas que resultan obsoletos en las nuevas circunstancias. Una vez más, los zapatistas ponen el dedo en las llagas que hacen falta e inspiran pensamientos y comportamientos de la nueva realidad.