Descripción:
El presente trabajo forma parte de un estudio más amplio cuya tesis plantea que en las escuelas de sectores populares existen maneras de decir y hacer indisciplinas bajo la forma de ausencia de una propuesta pedagógica significativa, esto es, restricción o privación de un conocimiento escolar socialmente relevante para la vida de los alumnos, que produce y es producida por otras formas singulares de indisciplinas pensadas y vividas por los estudiantes como estados de liberación y sujeción del cuerpo a la cultura pedagógica dominante. El estudio ha hecho visible diversos modos singulares de hacer indisciplina en la clase que parecen responder a una lógica de fragmentación e interferencia. Los alumnos del "grupo del fondo" se interponen en un recorrido que consideran mediocre y aburrido, a través de cadenas interminables de singulares intervenciones: el bullicio, el cuchicheo, la ironía, la risa y la burla, la queja, la crítica, el chiste, las exclamaciones, las canciones, los gestos, la mímica y los movimientos corporales. Dirigida a romper o fragmentar el discurso pedagógico en el aula, la interferencia es significada como indisciplina por los docentes de la escuela.