Resumen:
Reflexionar en torno a la cuestión de la cohesión social implica aceptar un difícil desafío, porque requiere imaginar un marco social y político lejano a la realidad en la que hoy interactuamos y en relación a la cual reflexionamos desde las Ciencias Sociales en Latinoamérica. Si bien entusiasma adherir a una propuesta que tiene como objetivo diseñar un escenario de cohesión social, reconozco los riesgos que implica pensarla sin su vinculación al mundo fragmentado y conflictivo que la realidad nos propone día a día. América Latina es un espacio geográfico, social y político donde la heterogeneidad nacional y étnica y la desigualdad económica han sido, y siguen siendo, expresiones de su realidad cotidiana. Cuestiones vinculadas a la discriminación, el prejuicio o la xenofobia, como así también la pobreza y la interrelación entre ellas, integran la literatura de las Ciencias Sociales en el continente. Sin embargo, menor es el protagonismo otorgado a esta producción, cuando estas cuestiones son abordadas a partir de las acciones, los discursos o las representaciones sociales de los sectores dominantes o de aquellos otros sectores que resultan beneficiados o fortalecidos, como consecuencia de la conflictividad que se genera al interior de la diversidad cultural y la desigualdad económica.