El compromiso por la erradicación de la pobreza en América Latina y el Caribe implica una acuciosa revisión, no sólo de los Programas y Políticas sociales implementados en la región, sino también de las definiciones y metodologías que de la pobreza se hagan y que sustentan tanto su identificación como su medición. De los enfoques con los que se entienda el problema depende en gran parte la evaluación de sus avances y retrocesos.