Resumen:
La experiencia haitiana es peculiar pero no única. Más aún, entraña lecciones relevantes tanto acerca de la naturaleza de la sociedad haitiana como para encarar algunos problemas medulares del modelo de democracia y de sistema político imperantes en el mundo hoy. En efecto, la trayectoria del llamado movimiento democrático es también la historia de una larga “transición hacia la democracia” y del proyecto concomitante de modernización del sistema político, ambas con fracasos y dificultades similares a los que son hoy en día motivo de debates en varios países.