This article aims to tentatively establish a genealogical analysis of the tilting of the gaze in the city of Córdoba, showing the entanglements between the angles of vision and the landscape. We tried to attend to those events when society and the urban environment were considered to have to be protected against something placed as a disease, whether it was interpreted in the biological or socio-political order. It is pointed out that one of the most used performances to install Covid 19 in the order of the sensible, had to do with various strategies for tilting the gaze, especially a "zenith way of appearing" from different cartographies. These placed in the order of visibility that which is present in our "surrounding world" remained hidden from our "perceptual world". By raising the idea of "way of appearing" in / of the landscape, it allows going beyond the physical or morphological presence (of a Real in philosophical terms) and certain dichotomies typical of the modern paradigm. The point then is that this "zenith mode of appearing" is neither good nor bad, nor is it neutral. We must look for other couplings - even zenith - so that this "gesture" or "way of appearing" that we carry out enables more supportive ethics and political projects that are developed from the collective.
El presente artículo se propone establecer de manera tentativa un análisis genealógico de la basculación de la mirada en la ciudad de Córdoba, mostrando los enmarañamientos entre los ángulos de la visión y el paisaje. Se trata de atender a aquellos acontecimientos en los que se consideraba que sociedad y medio urbano habían de ser protegidos ante algo colocado en tanto organismo extraño/enfermedad, sea ésta interpretada en el orden de lo biológico o socio-político. Se señala que una de las performances más utilizadas para instalar el Covid-19 en el orden de lo sensible, tuvo que ver con diversas estrategias de basculación de la mirada en especial un “modo cenital de aparecer” desde distintas cartografías. Éstas colocaban en el orden de visibilidad aquello que, presente en nuestro “mundo circundante”, permanecía oculto a nuestro “mundo perceptual”. Plantear la idea de “modo de aparecer” en/del paisaje, permite ir más allá de la presencia física o morfológica (de un Real en términos filosóficos) y de ciertas dicotomías propias del paradigma moderno. Este “modo cenital de aparecer”, ni bueno ni malo, tampoco es neutral en la gestión del acontecimiento. Debemos buscar otros acoplamientos –incluso cenitales- para que este “gesto” o “modo de aparecer” que realizamos habilite a éticas más solidarias y a proyectos políticos que elaboren desde lo colectivo el cuidado de lo común.