Resumen:
Las causas que originan la denominada crisis migratoria en la Unión Europea responden a factores heterogéneos, pero coincidentes en una mayoría de países africanos y del Medio Oriente. El enfoque en los países desarrollados sobre la problemática actual responde a intereses clasistas en los polos de poder, de las empresas transnacionales, del consorcio militar industrial, del espectro financiero y de los gobiernos que se arrogan el derecho a clasificar cuáles son las mayores amenazas para su seguridad y tergiversan las motivaciones que provocan un flujo indeseado de migrantes y desplazados. Los países subdesarrollados, en cambio, eufemísticamente denominados en desarrollo, muestran que las razones para el éxodo incontrolable hacia la Unión Europea se origina en la herencia colonial y neocolonial de expoliación de sus recursos, en los impactos neoliberales que constriñen los derechos a salir de la extrema pobreza, a la precaria alimentación y al hambre, a los deprimidos niveles de educación, a la desatención de la salud, a la recuperación y cuidado del medio ambiente para disminuir los efectos del cambio climático, a una inversión que se direccione hacia el desarrollo sostenible, al alcance de la igualdad de géneros, a la protección a la niñez y la juventud. Es indudable que la proliferación de conflictos es una de las causas para la crisis migratoria.