Descripción:
En nuestra maltrecha democracia, la desaparición forzada de los 43 estudiantes de la Normal Rural Isidro Burgos en Iguala, Guerrero, en la noche del 26 al 27 de sep-tiembre de 2014, visibilizó una violación cotidiana de derechos humanos. 43 dice mucho más que la mención de 130 mil ejecutados con violencia en México; es más contundente 43 que citar a millón y medio de desplazados; sacude más la conciencia 43 que la alusión a los no menos de 30 mil desaparecidos durante una absurda e inútil guerra al narcotráfico. Los 43 de Ayotzinapa fueron sacudida de conciencias para una energía social contenida durante años y que todavía busca los cauces que transformen esa indignación en acciones organizadas para un cambio radical y pacífico en México. Hay que sumar a esta barbarie a los otros 80 mil centroamericanos tragados por ese triángulo de las Bermudas de la violencia extrema en que se ha convertido la República Mexicana.