En este trabajo de investigación se reconstruye el impacto en la estructura del poder sindical de las reformas económicas y laborales diseñadas y aplicadas en México desde 1988 a la fecha. El programa neoliberal ha dado lugar a una nueva configuración del movimiento sindical, como reflejo de la nueva correlación de fuerzas dentro del Estado. También en este trabajo reconstruimos las nuevas rutas hacia la representación sindical, a partir de un seguimiento puntual de las biografías particulares de algunos líderes de distintos gremios. En las nuevas trayectorias, la piedra de toque no es el conflicto, sino la administración de convenios de productividad/calidad en los centros de trabajo, así como la inhibición en el uso de medidas de presión sindical. A la par de esta propuesta de "modernización desde arriba" de la gestión sindical existe otra ruta accidentada, genuina y desmitificadora: la de los nuevos liderazgos democráticos, que empiezan a ganar terreno e influencia en los espacios local, estatal y regional, ante el desmantelamiento del antiguo interlocutor central.