Descripción:
Una mirada oblicua sobre el proceso de institucionalización y profesionalización de la antropología mexicana descubre no sólo rupturas entre el periodo pre y posrevolucionario, sino también continuidades. Durante el porfiriato se manifiestan fuertes y constantes conflictos entre el Museo Nacional de Arqueología, Historia y Etnología y la Dirección de Inspección y Conservación de Monumentos Arqueológicos. Éstos son continuados después de 1917 por el Museo y la Dirección de Antropología. El episodio de acusaciones mutuas entre Manuel Gamio y Ramón Mena se inserta en este contexto; una de sus consecuencias fue la clausura definitiva de la Escuela Internacional de Arqueología y Etnología Americanas cuya labor había sido interrumpida en 1914.