Resumen:
En su libro La invención de los derechos humanos (2010), la historiadora Lynn Hunt señala que "los derechos humanos solo cobran sentido cuando adquieren sentido político" porque "son los derechos de los seres humanos en sociedad", "son los derechos de los seres humanos en relación con sus semejantes". Luego destaca que "para que los derechos humanos se volviesen evidentes, la gente normal y corriente debía disponer de nuevas formas de comprender, que surgieron a partir de nuevos tipos de sentimientos" (Hunt, 2010: 33). Los derechos humanos, por tanto, suponen una forma nueva de comprendernos y de vivir nuestras relaciones y estas nuevas relaciones implican, a su vez, nuevas sensibilidades relacionadas con la manera en cómo nos definimos como seres humanos y cómo en esa definición incluimos a las demás personas y cómo todo eso se traduce en las formas políticas que creamos para convivir.