Resumen:
Las guerras y conflictos se han multiplicado en el Siglo XXI. La superficie marina es algo más del 70 % del planeta, en la que se realiza una parte importante de la actividad humana: la pesca, el transporte de personas y bienes materiales, el turismo, la explotación de yacimientos submarinos, la producción de energía eléctrica, etc. La mayor parte del comercio mundial se mueve por rutas marítimas, fundamentalmente entre grandes centros económicos. Los principales acontecimientos que afectan el escenario marítimo son: guerras u otras acciones militares; disputas por la soberanía de regiones marítimas; la apropiación por parte de Estados poderosos de regiones marítimas o costeras; la piratería; actividades ilegales, como: tráfico de estupefacientes, tráfico de personas, el contrabando, la pesca o caza ilegal, la extracción ilegal de recursos minerales, vertimiento de residuos tóxicos, la acumulación de desechos en la superficie marina, etc. Importantes documentos, como la Carta de las naciones Unidas y la Convención de Derechos del Mar, son instrumentos para garantizar un racional empleo del Mar en beneficio de toda la Humanidad.
