Las expresiones y acciones racistas y discriminatorias basadas en la raza o etnicidad son comunes en América Latina, y el Perú no es la excepción. Con una población indígena significativa y una notable presencia de personas afrodescendientes, el país enfrenta dificultades para promover una cultura de inclusión. El racismo y la discriminación hacia personas indígenas y afroperuanas son constantes, y muchos limeños no reconocen su propio racismo, atribuyéndolo a otros o justificándolo a través de discursos relacionados con cultura y clase social. En este estudio, basado en entrevistas y trabajo de campo realizado en Lima durante el 2007, se exploran estas contradicciones, revelando cómo los limeños expresan el racismo, pero lo condenan y niegan al mismo tiempo. Finalmente, el análisis demuestra cómo el racismo continúa operando en Lima, moldeando las dinámicas sociales y las experiencias cotidianas de las personas, evidenciando la necesidad de un debate más profundo sobre estas problemáticas en el contexto peruano.
Racist and discriminatory expressions and actions based on race or ethnicity are commonplace in Latin America, and Peru is no exception. With a significant Indigenous population and an important presence of Afrodescendants, the country faces challenges in fostering a culture of inclusion. Racism and discrimination against Indigenous and Afro-Peruvian people is constant, while many residents of Lima fail to recognize their own racism, instead attribute it to others or rationalize it through discourses of culture and social class. This study, based in interviews and ethnographic fieldwork conducted in Lima during 2007, examines these contradictions, exposing how people from Lima express racism, while simultaneously condemn, and deny it. Lastly, the analysis reveals how racism continues to operate in Lima, shaping social dynamics and the everyday experiences of people. These findings prove the need for a deeper public and academic debate on these issues in the Peruvian context.