Descripción:
Los multimillonarios norteamericanos son los dueños de las grandes multimedias a través de las cuales forman y moldean los estados de opinión de la gente. De igual forma, a través de los Partidos Demócrata y Republicano, los ricos dominan las multimillonarias campañas electorales para la elección de sus gobernantes, tanto a nivel distrital como estadual y federal, garantizando que no acceda al gobierno nadie que represente intereses ajenos a los suyos, y que en el proceso de gobernar sean sus intereses los que avancen aunque se contrapongan a los de la mayoría. Este hecho determina que en la actualidad no pueda hablarse de un sistema democrático en Estados Unidos, pues no son los intereses del pueblo los que el sistema toma en cuenta, sino el de los ricos y millonarios, por lo que el sistema en realidad es una plutocracia. A este problema de carácter estructural se une ahora otro de carácter coyuntural como la extrema polarización política que tiene prácticamente paralizado el proceso de gobernar y dividido al país. Finalmente se analizan los peligros que acechan actualmente al sistema.