Descripción:
El anuncio del gobierno chileno de crear un Ministerio de Cultura ha abierto un debate sobre el sentido de la acción pública en materias culturales que se creía cerrado en el país tras la creación en el 2003 del Consejo Nacional de la Cultura. La que podría haberse interpretado como una buena noticia para el sector cultural, está siendo resistida. Se afirma que un Ministerio se traduciría en una pérdida de participación en la definición de las políticas culturales. No obstante, la oposición a la creación del Ministerio pareciera tener más que ver con argumentos que no se condicen con un auténtico debate sobre las políticas públicas ni con el análisis de la racionalidad de las decisiones gubernativas.