El libro tiene como objetivo estudiar la configuración de la región de Los Llanos -actual Argentina- durante el largo siglo XVIII, analizando sus dinámicas geográficas y sociales y los conflictos en torno a las tierras; es un importante aporte para el campo de los estudios histórico antropológicos de de dicha región pues da cuenta de las condiciones de formación y las transformaciones de los campos comunes o estancias indivisas durante el siglo XVIII.  El análisis de los pleitos por tierras permitió a las autoras dar cuenta de  la propiedad indivisa, funcional a la actividad ganadera ya que evitaba la fragmentación de las estancias.