Descripción:
Este trabajo versa sobre uno de los retos que se pueden avizorar para las políticas culturales cubanas: habitar la identidad de las alteridades constituidas o deterioradas durante tiempos de crisis. El estudio de la cultura, en su constitución y efectos en la vida social, debe rescatar la centralidad de los agentes sociales que han actualizado e improvisado sus repertorios simbólicos.