Si bien el desarrollo de la producción agrícola, el crecimiento sostenido y la conservación ambiental son algunas de las vías principales para el fortalecimiento de la región de la Orinoquia colombiana, las políticas que llevan a la tenencia de la tierra y, específicamente al desarrollo agrario, han sido impulsadas (principalmente) por factores geoestratégicos para grupos de poder neoliberal, que compran el derecho a la explotación y al consumo.
En efecto, la perspectiva capitalista que propone expandir la producción agraria a grandes escalas desde el acaparamiento y monopolización de tierras, ha introducido nuevas prácticas occidentales y políticas desarrollistas que han desatado un desequilibrio entre la tradición, el respeto a la tierra y la legitimación cultural de los indígenas y campesinos que habitan el departamento de Vichada desde hace más de cien años; relegando a las comunidades y confinándolas a condiciones de hambre, desnutrición y pobreza.
Con la introducción de dichas agroindustrias y la tecnificación de la tierra, algunos grupos indígenas, como la comunidad Sikuani, han perdido parte de su soberanía alimentaria y con ello se han visto obligados a trabajar en comunidad para subsistir entre el desarrollo moderno y las precarias condiciones.
Bajo este marco, la presente investigación aborda la realidad de cómo la población Sikuani del Vichada sobrevive continuamente al impacto de la industrialización que ha limitado la posibilidad de acceso a la tierra y ha condicionado las bases para alcanzar una soberanía alimentaria. Desde un enfoque cualitativo y cuantitativo se espera definir el impacto de la producción agroindustrial a la soberanía alimentaria de las comunidades ancestrales durante el periodo comprendido entre el 2010 y 2018. Ello, partiendo de la idea de que la gestión emprendida por el Estado no ha sido suficiente para garantizar a la población el pleno ejercicio de sus derechos en libertad, identidad y manifestación del espíritu desde cooperación y arraigo a la tradición cultural propia de su cosmovisión.
Sikuani
Although the development of agricultural production, sustained growth, and environmental conservation are some of the main ways to strengthen the Colombian Orinoquia region, the policies that lead to land tenure and, specifically to agricultural development, have been driven (mainly) by geostrategic factors for neoliberal power groups, which buy the right to exploitation and consumption.
Indeed, the capitalist perspective has introduced new Western practices and developmental policies that have an unbalanced tradition, respect for the land, and cultural legitimation of the Indigenous and peasants who have lived in the department of Vichada for more than a hundred years; relegating the communities and confining them to conditions of hunger, malnutrition, and poverty.
With the introduction of these agroindustries and the application of technology of the land, some Indigenous groups, such as the Sikuani community, have been forced to work to subsist between modern development and precarious conditions.
Within this framework, this research addresses the reality of how the Sikuani population of Vichada continuously survives the impact of industrialization that has limited the possibility of access to land and has conditioned the basis for achieving food sovereignty. From a qualitative and quantitative approach, it is expected to define the impact of agroindustrial production on the food sovereignty of ancestral communities during the period between 2010 and 2018. This is based on the idea that the management undertaken by the State has not been sufficient to guarantee the population the full exercise of their rights in freedom, identity, and the manifestation of the spirit from cooperation and rootedness to the cultural tradition of their worldview.
Sociólogo (a)
Pregrado