Through its history, one can see traces of African roots in the popular cult of San Baltazar in Argentina. In spite of starting as an imposed devotion by the clergy and the Spanish Crown to the slaves in the middle of 18th Century, early the later could insert their own cultural traditions, producing a sort of sui generis syncretism. Now days, those traditions are present in some religious ceremonies, especially in the devotional area. So far they consider that he is the patron saint of the joy and fun, they celebrate him with music and dance, being some of them from black roots. In this paper I wish to analyze one of these religious principles. So far there isn't any difference between kings and goods, the divine personality has a bipolar behavior that comes to real in a unique entity movable-non movable, thing- human. In this way, being goods also kings and kings also goods, their divine and royal attributes are object of devotion and subordination by their faithful people-subjects. My hypothesis is that that black people could have applied this principle so far they knew that double characteristic of this saint: divine (he is a saint) and royal (he is one of the three Wise Men), compatible with their ancestral believes.Al revisar la historia del culto popular de San Baltazar en Argentina, es posible encontrar sus raíces africanas. A pesar de haber empezado como una devoción impuesta por el clero y la Corona española a mediados del siglo XVIII , los esclavos lograron insertar sus propias tradiciones culturales, produciendo así una suerte de sincretismo sui generis. Hoy en día, dicha tradición está presente en celebraciones religiosas, especialmente en el área devocional. A San Baltazar se le considera el patrón de la alegría y la diversión y sus celebraciones se realizan con música y bailes, algunos de ellos de raíces negras. En este trabajo me propongo analizar uno de los principios de este culto. Como no hay diferencias entre los reyes y los dioses, la personalidad divina tiene un comportamiento bipolar que se hace real en una única entidad: móvil- inmóvil, cosa-humano. De esta manera siendo dioses reyes y reyes dioses, sus atributos tanto reales como divinos son objeto de devoción y de subordinación por parte de sus fieles: personas-sujetos. Mi hipótesis es que los afrodescendientes pudieron haber aplicado estos conceptos ya que conocían la doble característica del santo: divino (es un santo) y real ( es uno de los Tres Hombres Sabios), compatible con sus creencias ancestrales