Descripción:
"La gobernanza ha de sustentarse en un proceso de estructuración social que incluya a todos los grupos de población y cuente con el apoyo técnico e institucional apropiado. Esto genera grupos funcionales de ciudadanos capaces de responsabilizarse de su propio desarrollo y mejorar la gobernanza de sus comunidades rurales. En este sentido, es importante analizar algunos interrogantes en torno a las relaciones entre las instituciones públicas y las asociaciones locales, el papel de estas asociaciones en el territorio, y las dificultades encontradas en zonas con baja densidad de población. En este artículo se abordan dichas cuestiones desde la experiencia de más de 25 años de la Asociación Instituto de Desarrollo Comunitario de Cuenca en la estructuración y dinamización social de las zonas rurales despobladas de la provincia española de Cuenca. Desde esta visión de largo plazo, se proponen algunas claves para acompañar con éxito este proceso, lograr la motivación de la población, el arraigamiento de las asociaciones locales, y la generación de partenariados sostenibles que mejoren la gobernanza de las comunidades rurales en el proceso de desarrollo."