Descripción:
¿Cuántas veces nos hemos preguntado como docentes en el aula de música sobre las condiciones de talentoo de musicalidad de nuestros estudiantes?
¿Y, cuántas veces hemos dado respuestas con base en conceptos arraigados sobre el oído musical, la técnica instrumental o la lectura musical?
El pensamiento europeo del siglo XVII instauró una idea de la música limitada al ámbito sonoro y acústico, así como un desplazamiento de sus dimensiones somática y kinésica al terreno extra musical secundario1, desconociendo la experiencia corporal en sus tratados teóricos e históricos.