Developmental research on socio-political violence has focused primarily on explaining its medium- and long-term psychological effects on childhood and has generalized from large samples. Fewer studies have focused on exploring moment to moment daily life experiences of children who suffered episodes of this type of violence. In this research, a design based on the observation of a day in the life of two girls and two boys from southwestern Colombia was used to describe the context in which they develop, how they see themselves and how they resignify experiences of political violence that they lived in early childhood. Autobiographical narratives, interviews, and emerging themes analysis were used. Identities and experiences closely linked to the construction of relationships based on respect for others, positive self-assessment, recognition of the family as the organizer of their experiences, the construction of knowledge to develop skills, and the resignification painful experiences were identified. The discussion focused on implications of adopting a conception of the development process in terms of developmental trajectories not always foreseeable, nor oriented towards a final state; as well as the role of the selected method for that inquiry. It is concluded that current experiences do not necessarily derive from linear trajectories, as they are affected by situational factors inherent to the social ecology in which people live in.  La investigación desarrollista sobre la violencia socio-política se ha centrado principalmente en explicar sus efectos psicológicos a mediano y largo plazo en la niñez y ha generalizado a partir de grandes muestras. Pocos estudios se han centrado en explorar momento a momento las experiencias de la vida cotidiana de niños y niñas que sufrieron episodios de ese tipo de violencia. En esta investigación se usó un diseño basado en la observación de un día en la vida de dos niñas y dos niños del Suroccidente Colombiano para describir el contexto en que se desarrollan, cómo se ven a sí mismos y cómo resignifican experiencias de violencia política que vivieron en su primera infancia. Se usaron relatos autobiográficos, entrevistas y un análisis de temas emergentes. Se identificaron identidades y experiencias estrechamente ligadas a la construcción de relaciones basadas en el respeto a los demás, la valoración positiva de sí mismos, el reconocimiento de la familia como organizadora de sus experiencias, la construcción de saberes para desarrollar habilidades y la resignificación de las experiencias dolorosas. La discusión se centró en las implicaciones de adoptar una concepción del proceso de desarrollo en términos de trayectorias de desarrollo no siempre previsibles, ni orientadas a un estado final; así como el papel que tiene el método seleccionado en esa indagación. Se concluye que las experiencias actuales no necesariamente se derivan de trayectorias lineales, pues son afectadas por factores situacionales inherentes a la ecología social en las que viven las personas.