Descripción:
"La producción pornográfica dura, degradante y violenta contra las mujeres es en realidad un espejo en el que la cultura patriarcal debe mirarse. Un espejo que nos regresa la imagen patriarcal por excelencia: la de la violencia, sometimiento y degradación en la relación de los hombres con (contra) las mujeres. Mirarnos en el espejo de la pornografía dura y degradante es mirarnos en el espejo de nuestro mundo actual."