En este trabajo publicado en el 2000, los autores se plantean como objetivos: ofrecer una evaluación de los estudios realizados en México sobre el mercado del suelo urbano desde 1940 hasta el momento de su investigación, y revisar el impacto que este conocimiento ha tenido en el desarrollo de las políticas gubernamentales relacionadas con el tema. La primera parte incluye un análisis y descripción de 76 trabajos revisados, presenta cuatro cuadros que los clasifica de acuerdo con su origen disciplinario, su enfoque teórico, el tipo de fuentes consultadas y su cobertura territorial. Tomando como base esa caracterización, en esta obra se analiza la contribución de esos estudios en el nivel del conocimiento alcanzado sobre la temática del mercado del suelo urbano. La segunda parte consiste en la presentación de una breve síntesis descriptiva de los 76 trabajos consultados para la investigación así como de los principales documentos gubernamentales emitidos desde 1976, vinculados con el tema. Una de las conclusiones generales de los autores es que a pesar del evidente auge que tuvieron los estudios sobre temas urbano-regionales, en especial en la década de los ochenta, el caso específico del mercado del suelo fue muy poco abordado. Señalan que el problema no es tanto cuantitativo sino cualitativo siendo evidente la falta de rigor teórico y metodológico en muchos de los estudios al respecto. Este déficit en el conocimiento sobre el tema se debe entre otras cosas a que su estudio tiende a ser subsidiario, como elemento secundario de una temática principal, y por el rechazo de muchos investigadores quienes consideran que investigar el mercado es convalidarlo. Estas razones teóricas, pero también ideológicas, han generado un conocimiento fragmentario que ha llevado a que los agentes sociales, económicos y políticos tomen decisiones (compra-venta, políticas públicas) sobre bases endebles y por ende de carácter limitado o erróneo.