La posibilidad de otras economías diferentes a las estructuras microeconómicas impartidas por la racionalidad instrumental neoclásica saltan a la vista desde el momento en que culturalmente los científicos sociales se empiezan a preocupar por el estudio de las prácticas autárquicas de las comunidades indígenas, campesinas, afro descendientes, gremiales y familiares. Las experiencias de la cotidianidad en los procesos de intercambio mercantil de estos conglomerados humanos se afianzan en esquemas de comercio que no están atravesados por la lógica del mercado occidental (competencia perfecta, monopolio, competencia monopolística y oligopolio) e incluso ni por la supremacía del dinero –mercancías sagradas, la fiesta, la reciprocidad, el sacrificio el don-, porque sus intenciones posiblemente están superando la tendencia agresiva de la acumulación del capital (Marx, 1867/1977; 1844/1993) prevaleciente en la sociedad mercantil moderna. Como las categorías de la «premodernidad» vs la «modernidad» están todavía ausentes en el imaginario de estas colectividades, lo más usual para comprender el desarrollo de sus vínculos económicos es empezar por reconocerlas dentro de los espacios de la autenticidad, sin que esto implique una ruptura de orden mitológico ni epistémico para su permanencia en el tiempo. Aceptar otras posibles economías –emotivas, morales, de la razón–, diferentes a la racionalidad instrumental de occidente, es un gran paso para comprender nuestra existencia multicultural, a pesar de las contradicciones en que el capitalismo salvaje nos ha mantenido durante mucho tiempo.  The possibility of other economies other than the microeconomic structures imparted by neoclassical instrumental rationality are evident from the moment cultural social scientists are beginning to worry about the study of the autarchic practices of the indigenous, peasant, Afro-descendant communities, Guilds and family members. The everyday experiences in the mercantile exchange processes of these human conglomerates are consolidated in trade schemes that are not crossed by the logic of the western market (perfect competition, monopoly, monopolistic competition and oligopoly) and even by the supremacy of money - sacred marriages, festivity, reciprocity, sacrifice, the gift - because their intentions are possibly overcoming the aggressive tendency of the accumulation of capital (Marx, 1867/1977, 1844/1993) prevailing in modern mercantile society. Since the categories of “premodernity” versus “modernity” are still absent in the imaginary of these collectivities, the most usual thing to understand the development of their economic bonds is to begin by recognizing them within the spaces of authenticity, without implying A rupture of mythological or epistemic order for its permanence in the time. Accepting other possible economies -emotional, moral, reason-, different from the instrumental rationality of the West, is a great step to understand our multicultural existence, despite the contradictions in which savage capitalism has kept us for a long time.