Descripción:
La sexualidad se ha configurado históricamente sobre la base de la prohibición del incesto. Y también el amor se ha constituido en la transición de la adolescencia al mundo adulto. La desregulación de la sexualidad ha traído como consecuencia el incremento de la pedofilia y el incesto. Esto nos coloca de lleno en el terreno de la perversión tan presente en el mundo contemporáneo al desacreditarse los valores simbólicos, hasta el punto que ya no pueden servir de protección al sujeto contra el desvanecimiento de su identidad.