Descripción:
Es la relación con las cosas, el volumen de riqueza y la propiedad lo que condiciona la relación con las personas. Tal contexto confiere a cualquier actividad de corrupción no sólo un alto grado de impunidad ante el juicio de la ética, sino también la mejor coartada con la complicidad entre una opinión pública y los actores y sectores corruptos. Este artículo trata de entender los orígenes sociales de la corrupción desde varios enfóques, y sus implicaciones para el sistema político.