Descripción:
Los constructores de la Gran Pirámide concebían el ser humano compuesto por dos partes divinas y una humana. La “Cámara del Rey” simboliza la disolución de esta unión al momento de la muerte. En este sentido, dicha cámara cumple de forma simbólica la función de matriz para el renacimiento, al momento de la muerte, a otro nivel de existencia.