Descripción:
El movimiento cívico-político que surgió a principios de los años veinte en Cuba fue un movimiento de protesta que engendró una crítica profunda a la joven República. El movimiento produjo un espectro político que abarcaba desde un nacionalismo conservador moderado, hasta un anti-imperialismo radical. Surgió aquí no sólo el problema de generaciones, sino también la cuestión del alcance y carácter de la democracia, del desarrollo económico efectivo y –de nuevo– del lugar de los afrocubanos en la sociedad de Cuba.