Descripción:
El escenario de la misión jesuita en México estuvo constituido por la periferia noroccidental del imperio español, donde el poder militar de los europeos se había reducido considerablemente y la fuerza de resistencia de los indígenas beligerantes había crecido. La obra de los misioneros empezó en 1591 en Sinaloa y encontró su repentino fin en 1767, cuando por decreto real la Compañía de Jesús fue expulsada de todos los dominios españoles. A lo largo de su existencia la misión jesuita transcurrió por diferentes fases y desarrolló varios modelos regionales. Presentar una versión única de la vida cotidiana en las misiones es imposible debido a esta variedad. Aquí se esbozan ciertas situaciones de interacción entre el programa de los jesuitas y los indígenas que se consideran ilustrativas para echar luz sobre la complejidad del proceso de misión.