La provincia de Buenos Aires promueve desde fines del siglo XIX distintas acciones para formar a sus docentes durante el ejercicio de su trabajo. Esta tesis aborda un tema poco indagado en los estudios sobre la historia de la educación en Argentina, ya que analiza las políticas de perfeccionamiento a las que accede el magisterio bonaerense entre los años 1959 y 1985 a través de los Seminarios dictados en las Jefaturas de Zona y los Centros de Investigaciones Educacionales (CIE). El modelo educativo desarrollista, en diálogo con otras tradiciones, deja su impronta en esta experiencia. Se distinguen dos ciclos de políticas en la institucionalización de estos trayectos formativos: el primero se produce entre 1959 y 1967, con el dictado de seminarios en las Jefaturas de Zona y el segundo va de 1967 a 1985, cuando se crean los CIE y se sistematiza el perfeccionamiento del magisterio bonaerense. La investigación reconstruye estas políticas y las acciones que las concretan, en las que participan miles de docentes. Además, se analiza el papel desempeñado por inspectores, inspectoras y asesores docentes en el desarrollo de esas propuestas. También se describen las actividades de investigación llevadas a cabo por maestras y maestros en los seminarios y el modo en que los CIE se involucran en relevamientos e investigaciones distritales y regionales. Finalmente, se identifica un rasgo característico y común de estas instituciones, el cual es la importancia que adquieren sus bibliotecas pedagógicas, no solo al posibilitar el acceso a bibliografía actualizada, sino también por las actividades de extensión cultural que promueven al configurar una particular relación de las y los docentes con el mundo de la cultura.