Descripción:
Desde el inicio del siglo XXI, siguiendo la instauración de programas de
nanotecnología en países industrializados y en desarrollo, varias organizaciones
no gubernamentales (ONG) y sindicatos han divulgado una serie de
comunicados públicos en los que se posicionan sobre el desarrollo de esta
tecnología emergente (Invernizzi y Foladori, 2013). En ellos se abordan riesgos
potenciales de las nanotecnologías que revelan un encuadramiento del
problema mucho más amplio del que se observa en la discusión internacional
sobre regulación y en los documentos relativos a los riesgos elaborados
por gobiernos e industrias, no obstante que los potenciales riesgos a la salud
y el medio ambiente son la principal justificación para elaborar normas y
regular las nanotecnologías, y por ello los actores involucrados las discuten.
Los sindicatos y ONG incluyen en sus preocupaciones otros riesgos de dimensión
socioeconómica, como el posible impacto de las nuevas tecnologías en el
empleo/desempleo, la calificación del trabajo y la concentración económica.
Hay otras dimensiones, como las implicaciones éticas y legales, que no se
discuten en este trabajo.