Descripción:
Finalizando el año 2001, en una biblioteca de Manizales, durante una hora cada viernes en las tardes se dio una sesión de cuentos narrados por contadores de historias. A estos encuentros asistió Manuela No faltó a ninguna sesión.Manuela no ve, carece de imágenes, es decir, siguiendo a Aristóteles descubrimos que la imaginación se origina en el contacto del ojo con el objeto, en su forma, en su tamaño, en su color... no en lo demás, no en lo que atañe a los otros sentidos del humano y, por ello mismo, Manuela no puede imaginar. De hacerlo rompería el paradigma, pues para imaginar el prerrequisito es la imagen, que a su vez tiene como prerrequisito el objeto (¿?).