Descripción:
Existe un fenómeno que por más de siglo y medio ha caracterizado a Latinoamérica: la dictadura. Y el dictador muy bien puede ser la imagen paterna que se impone una sociedad sin padres, según el sentido que se patentiza en “El complejo de hijupputas” de Femando González.2 Dentro de lo más importante, este complejo se transparenta en las radionovelas y las canciones de las clases bajas, así como en el intenso amor a la figura materna y la ausencia de la paterna en la mayor parte de los hogares populares. En la clase media se experimenta como no poder estar con Dios (la clase alta) ni querer estar con el diablo (la pobreza vergonzante), sino en un limbo de seres sin nombre. Y aquella ilegitimidad se manifiesta en los de arriba por su aferramiento al poder recurriendo muchas veces a medios ilegítimos, sin lograr la aceptación de su dominio por las grandes mayorías, al igual que en la degradación que establecen sobre si mismos al darle primacía a lo extranjero sobre lo autóctono del país.