Descripción:
La obra de José Guadalupe Posada abarcó tantos y tan variados espacios expresivos, que cuando a la distancia de cien años de su desaparición física se lanza por decreto una mirada a su legado, encontramos que, como Nación, apuradamente podríamos explicarnos sin sus propuestas visuales y su incansable trabajo. Posada confecciona infinidad de imágenes. Portadas de libros, cajetillas de cerillos, juegos como la lotería o el circo, carteles, etiquetas, cajas para puros, vitolas y, por supuesto, sus famosísimas hojas volantes que ilustran la vida cotidiana narrando, de manera más que ingeniosa, los aconteceres populares.