Descripción:
El anuncio de la visita del papa Francisco a Ciudad Juárez levantó expectativas diversas, desde la esperanza de bendiciones, alegría o consuelo, hasta la perspectiva de derrama económica. En la ciudad expectante, hubo maquillaje urbano, mercadeo empresarial, explosión mediática y eventos académicos. El papa, crítico del capitalismo y la desigualdad, fue incómodo para el gobierno mexicano y estuvo sometido al protocolo diplomático. Emitió su mensaje ante una sociedad pulverizada y un gobierno cínico. Quede pendiente ver en qué medida su prédica transformadora, tolerante e igualitaria, contribuirá a cambiar las condiciones de pobreza, violencia y vulnerabilidad.