Descripción:
El control social es un elemento natural de las dinámicas territoriales de los grupos sociales, es indispensable para la construcción de lo social. Sin embargo, como resultado del ejercicio de prácticas de control diversas desde los múltiples actuantes que intervienen en la relación sociedad y espacio, se generan algunos efectos tanto positivos como negativos que es necesario reconocer a la hora de planificar los territorios locales.