Descripción:
La promulgación de la carta de 1991, represento para el país un enorme avance, al incorporar no solo una serie de mecanismos de participación, que permitiesen a los ciudadanos apropiarse de espacios de decisión, sino que abordo una cuestión de vieja data en Colombia, la cuestión étnica y su reconocimiento. Los diferentes grupos étnicos, durante largo tiempo había demandado de parte del Estado mayor inclusión y participación en escenarios deliberativos, el camino no fue fácil, y los viejos esquemas de exclusión se mantienen presentes en algunos sectores no solo sociales y políticos, el siguiente artículo, busca de alguna manera abordar de manera descriptiva el proceso que se ha llevado a cabo en torno a la declaración de la pluralidad como fundamento esencial de nuestra nación, dejando de lado el concepto clásico de dicho tema, que impero desde el siglo XIX, hasta finales del siglo pasado.